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Fuiste heroica en los años coloniales,
cuando tus hijos, águilas caudales,
no eran una caterva de vencejos.
Mas hoy, plena de rancio desaliño,
bien puedes inspirar ese cariño
que uno les tiene a sus zapatos viejos…
A mi ciudad nativa
El rechazo a la burguesía que Fernández Moreno muestra en su poema titula-
do Burgueses, y el rechazo que muestra López en Canción burguesa (“Procura,
mientras muere la mies en la cizaña,/ fl exible cual felino que avizora el ratón,/
medir el salto…Y luego…¡que gire la cucaña/ de la vida! –No hay fuerza contra
la tradición…”) no son el mismo desprecio radical que siente por ella, como
ejemplo entre poetas contemporáneos, el hispano-argentino Pedro Herreros en
su poema Manifestación: “Abajo la burguesía./ Abajo los asesinos” (1936, p.29),
pues su presunta negación a los burgueses, como dice Monteleone (2006, p.268)
“no es más que la velada afi rmación de un orden”. Este rechazo también forma
parte esencial del individuo, como oposición, por cuanto el modelo de poeta que
construyen los textos de Fernández Moreno y de Luis Carlos López, solo son
concebibles en el marco de una burguesía. El poeta argentino se interna en la
multitud, el poeta colombiano es parte de esa pequeña multitud de cartageneros,
pero no son unos marginales y están integrados en el acontecer cotidiano de su
ciudad; López vive de su negocio de comerciante y así lo recuerdan actualmente
Cartagena, como un perfecto burgués
4
.
Si pensamos en la observación caminante del cruce de innumerables relaciones
en los paseos por la enorme ciudad de Buenos Aires y por la provinciana ciudad
de Cartagena, como un sistema de trabajo, se pone de manifi esto que el “pa-
seante” de pequeño pero completo recorrido de López y el fl âneur de Fernández
Moreno, como el de Baudelaire, no son en el grado en que pudiéramos pensar,
como dijimos, un autorretrato real de los poetas:
4 Producto de ese carácter burgués parece ser el frecuente empleo de “términos fi siológicos”, como los llamó
George D. Shade (1954, p.119), para describir estados anímicos: neurosis, fl emático, atonía, bulimia, anémico,
ataraxia, dipsómano, cistitis, epilepsia, hipocondríaco, apoplético, etc. Sustantivos y adjetivos que fonéticamen-
te destacan, como muchos otros términos “no fi siológicos” que el poeta empleó, en el conjunto del poema, y
en nada desentonan con el temperamento y la agudeza de su juicio: somnífera canción, esqueletosa fatalidad,
gelatinoso el mar, hierático gesto, sed caliginosa, andrógino mentecato, etc.
ALFONSO RUBIO
CUADERNOS DE LITERATURA DEL CARIBE E HISPANOAMÉRICA • ISSN 1794-8290 • NO. 25 • ENERO-JUNIO 2017 • 15 - 29